Porsche Taycan

Mission E cambia su nombre a Taycan para empezar a venderse a finales de 2019 con un sistema de carga y rendimiento extraordinario

 Taycan, la evolución eléctrica de Porsche 

En el marco de los 70 años de Porsche se confirma la próxima entrada al mercado del Mission E que ahora cambia de nombre a Taycan

Stefan Weckbach, dirige la gama de modelos Taycan desde 2014, ayudante del Presidente de Porsche AG, los últimos cuatro años los ha dedicado a la movilidad eléctrica. Nadie mejor que Weckbach para contestar una serie de preguntas sobre el primer Porsche con tren de rodaje ciento por ciento eléctrico. 

-El siguiente es un resumen de la entrevista original-

Los autos eléctricos no son, de momento, superventas. ¿No es un poco pronto para lanzar el Taycan?

Ha llegado el momento. La movilidad eléctrica es ya una tradición en la casa: en la Exposición Mundial de París de 1900, Ferdinand Porsche presentó el Lohner-Porsche, un vehículo eléctrico con una autonomía de 50 kilómetros. Desde 2010 han aparecido variantes híbridas de los modelos Porsche. Con ello nos convertimos en el primer fabricante de automóviles de gama alta en ofrecer dentro de su portafolio tres híbridos enchufables. El 918 Spyder es una prueba de lo que se puede conseguir cuando al motor atmosférico de 8 válvulas de un deportivo le sumas dos motores síncronos en ambos ejes.

¿El Taycan nos depara nuevas virtudes?

El Taycan se conduce, se ve y se siente como un Porsche, solamente cambia el sistema de propulsión. Un auto eléctrico también puede ser purista y despertar emociones. Para nosotros no es ninguna incoherencia. Al contrario, con una tecnología de propulsión óptima y el concepto adecuado de vehículo se pueden afinar todavía más las características de un Porsche. Fíjese en el ejemplo de la batería situada en los bajos: esta circunstancia permite al Taycan rebajar al máximo el centro de gravedad, siendo incluso más bajo que el de un 911. Y si a ello le añadimos una distribución de pesos óptima entre los ejes, el Taycan es, en su diseño básico, un auto totalmente deportivo.

Los deportivos eléctricos suelen perder dinámica de propulsión después de varias aceleraciones fuertes…

No es el caso del Taycan, donde hemos implantado dos medidas para mantener las mismas prestaciones en todas las situaciones de ruta. Por un lado, a la hora de elegir los motores de tracción hemos optado por máquinas síncronas de funcionamiento continuo que proporcionan un elevado rendimiento permanente garantizando, por tanto, un rendimiento reproducible. Es decir, que se puede acelerar a fondo no una vez sino varias veces consecutivas. Y lo mismo vale para una conducción a alta velocidad constante. Por otro lado, hemos desarrollado un sistema de refrigeración inteligente que evita posibles pérdidas de potencia por un aumento excesivo de la temperatura, proporcionando la refrigeración exacta a cada componente que la necesite.

Para poder adaptarse al uso diario, los autos eléctricos deben tener una autonomía suficiente. Para ello necesitan baterías relativamente pesadas que, a su vez, merman el rendimiento. ¿Cómo han solucionado esta contradicción?

Uno de los retos a la hora de diseñar el Taycan ha consistido en encontrar el equilibro perfecto entre autonomía y rendimiento. Nuestras soluciones para reducir el peso de la batería es la idea de ‘Intelligent Performance’, con ello conseguimos, una autonomía eléctrica de más de 500 kilómetros manteniendo simultáneamente un peso lo más reducido posible. Aquí son muy importantes una alta densidad de potencia y una alta eficacia energética de la propulsión eléctrica: esto por un lado significa que los motores eléctricos en sí pesan muy poco, y por otro lado una eficacia energética más elevada y por tanto un consumo de energía más reducido que nos permite utilizar baterías más pequeñas y ligeras. Además, al desarrollar el Taycan también hemos apostado mucho por la aerodinámica y hemos peleado cada milésima de coeficiente de arrastre en el túnel de viento. Esto nos ha permitido reducir la resistencia del aire al nivel más bajo posible.

Un Porsche de propulsión eléctrica no solamente tiene que ir rápido, sino que también debe poder cargarse rápido. Con la tecnología de 800 voltios, en algo más de 15 minutos se puede cargar energía suficiente para recorrer 400 kilómetros, otro ejemplo más de ‘Intelligent Performance’.

Actualmente, Porsche colabora con otros fabricantes para crear un sistema de carga rápida para vehículos eléctricos en los principales ejes de comunicación europeos. Está previsto que en 2020 exista una red de más de 400 estaciones de carga.

Porsche lo presentará a finales de 2019. Y puedo asegurarle que no será simplemente un auto eléctrico. Será un Porsche.

Prensa 

autonoble.mx

TWR Supercat: Lo que Jaguar no supo renovar
Infiniti QX80 : Cuando el japonés hace lujo
Los números que dejó Checo Pérez
Jaguar tenía todo para ganar
VIDEO
Archivos
NEWSLETTER