Como una excéntrica ofrenda dedicada a todos aquellos músicos contemporáneos y del rock and roll que han fijado su mirada en algún auto de la firma, llega esta increíble edición basada en el coupé Wraith
La firma de hiper-lujo ha sido responsable de muchas ediciones que, inspiradas en diversos temas, han sido tributos de verdadera opulencia y exclusividad. Así ha llegado esta edición, que, como bien lo citábamos, está completamente inspirada en los grandes artistas musicales que en algún momento han elegido a Rolls-Royce como su medio de transporte. El impresionante coupé, está lleno de sorpresas que, precisamente al segmento que está dirigido y aún al que no, serán motivo de su total atención.
Al exterior, además de los rines con acabado bicolor contrastante a la carrocería encontramos una pintura de lo más exclusiva a la que han bautizado como “Lyrical Cobre”, fuera de ello, no hay cambios respecto a un Wraith común, por llamarle de esta forma. Tal situación no es igual al interior, donde sobresale un habitáculo refinado y con un cierto aire “goth”. La piel, en color negro, es contrastada por detalles en bronce, que se pueden apreciar en el tablero y en las puertas, entre otros.
Lo mejor está reservado para el sistema de sonido, el cual cuenta con 16 altavoces en total, de los cuales: dos son subwoofers, dedicados a los graves; siete para rangos medios y siete para tonos agudos. Este equipo de sonido con potencia total de 1,300 watts ha sido el resultado de dos años de trabajo entre los mejores ingenieros de audio automotrices y los propios arquitectos de Rolls-Royce, al que han llamado “BespokeAudio”.
La potencia sigue de la mano del Wraith, por ello es que la mecánica V12 con desplazamiento de 6.6 litros y 624 HP se mantiene inmaculada. Más allá de esto, seguramente será limitado a un cierto número de unidades con un precio muy especial, para lo cual, estaremos muy atentos.
Eduardo Jiménez