Mercedes-AMG PureSpeed crea un precedente en la creación de sus propios autos, pues esta vez inicio su serie limitada Mythos con un concepto roadster al estilo antiguo que implementa elementos de sus autos de Fórmula 1 como el destacado HALO en la parte central. De hecho por eso se eligió el Gran Premio de Mónaco para presentar el auto. El diseño radical de un coche de alto rendimiento de dos plazas completamente abierto sin techo ni parabrisas es un homenaje a las carreras de motor.
El concept car ofrece una vista previa del primer modelo de la muy limitada serie Mercedes-Benz Mythos. El vehículo se dio a conocer en un pontón flotante en el puerto del principado y también impresionó a los pilotos de carreras del Mercedes-AMG PETRONAS F1 Team Lewis Hamilton y George Russell.
La serie estrictamente limitada de 250 unidades solo estará disponible para los entusiastas y coleccionistas más dedicados de Mercedes-Benz para poder disfrutar del “pináculo de la exclusividad” de Mercedes-Benz en el segmento superior.
Con sensaciones más cercanas a las de un Fórmula 1, un punto culminante del nuevo deportivo es el sistema HALO que reemplaza el pilar A convencional del vehículo. Este elemento es un derivado directo de la primera clase de automovilismo y ha sido parte de todos los vehículos de Fórmula 1 desde 2018. Protege la cabeza del conductor en caso de accidente. Lo que a su vez crea un campo de visión como en la Fórmula 1 para sus ocupante pues ni el techo, ni el parabrisas ni las ventanas laterales los separan de su entorno.
El interior añade más aspectos destacados, con su color único y su concepto de equipo, así como un reloj personalizado diseñado por IWC Schaffhausen en el salpicadero.
En el exterior, el diseño de las ruedas se caracteriza por el revestimiento único de fibra de carbono en las cubiertas de las ruedas delanteras y traseras. Las cubiertas de las ruedas traseras están completamente cerradas para mejorar la aerodinámica. Las cubiertas de las ruedas delanteras están abiertas para optimizar el flujo de aire en la parte delantera para el enfriamiento de los frenos y la fuerza descendente.
Muchos otros detalles de diseño también rinden homenaje al automovilismo. Los dos contrafuertes voladores detrás de los asientos recuerdan a los legendarios coches de carreras como el 300 SLR, en el que Stirling Moss y Denis Jenkinson ganaron el Mille Miglia de 1955 en Italia, con una velocidad media récord de un increíble 157 km/h en la vía pública.